Si está pensando en ponerse relleno, probablemente haya oído hablar de la posibilidad de tener que disolverlo. Pero, ¿cuándo y por qué puede ser necesario disolver el relleno? Un relleno sólo debe disolverse si se ha cometido un error durante el proceso de inyección inicial. Los errores pueden incluir un volumen desigual, migración o, simplemente, que no gusten los resultados.
Si necesita disolver su relleno, deberá recibir inyecciones de hialuronidasa (Hyalase) cerca del lugar de inyección del relleno original. La hialasa es una forma sintética de las enzimas del organismo que degradan el ácido hialurónico, el principal componente de la mayoría de los rellenos. Cuando se inyecta Hyalase, se acelera el proceso de disolución del relleno que, de otro modo, se produciría con el tiempo.
La cita para la disolución es similar a la cita inicial para el relleno: su inyector consultará con usted sus objetivos, le aplicará una crema anestésica si es necesario y le inyectará la hialuronidasa. La disolución suele surtir efecto de inmediato, pero cada persona y marca de relleno es diferente, y podría tardar hasta unos días en alcanzar los resultados completos. Al igual que ocurre con las inyecciones de relleno, los efectos secundarios de la disolución incluyen hematomas e hinchazón.
En resumen, sólo debería ser necesario disolver el relleno si se ha cometido un error durante el proceso de inyección inicial. Excederse con el relleno también puede llevar a la necesidad de disolverlo. Si necesita disolver el relleno, el proceso es similar al de la inyección de relleno y puede realizarse rápida y fácilmente si es necesario.
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