Las varices y las arañas vasculares pueden ser difíciles de prevenir para algunas personas, sobre todo si existen factores de riesgo subyacentes o son hereditarias. No obstante, hay varias medidas que puede tomar para minimizar la probabilidad de desarrollarlas.
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Realizar actividad física
El ejercicio regular es beneficioso para mejorar la fuerza de las piernas, la circulación y la resistencia de las venas. Los ejercicios que hacen trabajar los músculos de las piernas pueden ayudar a prevenir la formación de nuevas arañas vasculares y varices. Los ejercicios de bajo impacto, como la natación, el ciclismo, el yoga o los paseos, pueden aliviar los síntomas y el aspecto de las venas existentes. -
Mantener un peso corporal saludable
El sobrepeso o la obesidad pueden aumentar las probabilidades de desarrollar varices y arañas vasculares. Perder los kilos de más puede aliviar la presión sobre las piernas y mejorar el flujo sanguíneo. -
Eleve las piernas
Cruzar las piernas al estar sentado o de pie durante periodos prolongados puede hacer que la sangre se acumule en las piernas, aumentando el riesgo de arañas vasculares y varices. Elevar las piernas permite que la sangre acumulada se drene y vuelva al corazón. -
Evite pasar muchas horas sentado o de pie
Estar sentado o de pie durante largos periodos de tiempo puede aumentar la probabilidad de que la sangre se acumule en las piernas, con el consiguiente riesgo de aparición de varices y arañas vasculares. Si pasa mucho tiempo sentado, levántese y camine cada 30 minutos. Si pasas mucho tiempo de pie, intenta hacer descansos cada 30 minutos. -
Usar medias de compresión
Las medias de compresión, que son calcetines especiales y ajustados diseñados para favorecer la circulación, pueden prevenir la formación de arañas vasculares y varices o reducir su gravedad. Actúan comprimiendo las venas de la parte inferior de la pierna, ayudando a que la sangre vuelva al corazón.