Antes de administrar un tratamiento láser para la depilación, es importante tener en cuenta ciertos factores del historial médico del paciente. Estas son algunas consideraciones a tener en cuenta antes del procedimiento. Los pacientes con aparición repentina o excesiva de hirsutismo o hipertricosis deben ser evaluados en busca de causas subyacentes, especialmente en entornos no clínicos en los que las afecciones subyacentes pueden pasar desapercibidas. Pueden realizarse pruebas de laboratorio como la testosterona total y libre y la dehidroepiandrosterona sérica (DHEA-S) para evaluar la presencia de una causa subyacente.
Los pacientes con antecedentes de queloides deben ser advertidos del mayor riesgo de cicatrización, y puede ser necesario ajustar los parámetros del tratamiento en consecuencia. Los pacientes con antecedentes de hiperpigmentación o hipopigmentación tras un traumatismo o una inflamación deben ser identificados y se debe considerar la profilaxis contra el virus del herpes simple (VHS) si es necesario. Según la mayoría de las autoridades, las mujeres embarazadas no deben someterse a tratamientos electivos con láser.
Se recomienda que los pacientes eviten broncear la zona tratada durante varios meses antes y después de la sesión. Las hidroquinonas pueden utilizarse en algunos tipos de piel antes del tratamiento, y los pacientes deben aplicarse protector solar con diligencia. Debe advertirse a los pacientes con vitíligo del posible aumento de la pérdida de pigmento con el tratamiento láser. Los pacientes diabéticos pueden experimentar un retraso en la cicatrización de las heridas si se produce alguna quemadura epidérmica.
Los pacientes también deben ser informados de los posibles efectos secundarios del tratamiento capilar con láser, que incluyen hiperpigmentación e hipopigmentación. Los métodos de enfriamiento pueden utilizarse para minimizar el riesgo de daño epidérmico, que puede producirse debido a la absorción de la luz por los cromóforos de melanina de la epidermis y el folículo piloso.
Tras una discusión exhaustiva de todos los riesgos y beneficios, el paciente debe dar su consentimiento informado firmado antes del tratamiento. Es importante minimizar los efectos secundarios del tratamiento capilar con láser, y deben tomarse precauciones para evitar cualquier reacción adversa.
